Redacción: Inés Arroyo
Una investigación reciente del Nationwide Children's Hospital ha revelado preocupantes riesgos asociados al consumo de cannabis durante el embarazo. Liderado por la Dra. Sarah Keim, el estudio muestra que los niños expuestos al tetrahidrocannabinol (THC) en el útero presentan mayores dificultades para controlar impulsos, prestar atención y gestionar la agresividad. El consumo de cannabis puede afectar el desarrollo cerebral del feto, impactando áreas críticas para el comportamiento y el aprendizaje; los niños expuestos a estas sustancias muestran dificultades en habilidades cognitivas esenciales, como memoria y planificación, lo que puede repercutir en su éxito escolar y social.
A medida que el cannabis se legaliza en más estados, crece la preocupación entre los profesionales de la salud, la Academia Americana de Pediatría (AAP) y el Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos advierten sobre los riesgos del consumo durante el embarazo, asimismo, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) subrayan la necesidad de evaluar estos riesgos al considerar el uso de cannabis. Los efectos del THC no se limitan al embarazo; también pueden transmitirse a través de la leche materna.
Esto implica que los bebés pueden seguir expuestos al THC, incluso después de que la madre haya dejado de consumir cannabis, por ello, se recomienda a las madres lactantes evitar su uso. Estos hallazgos resaltan la importancia de educar a las mujeres embarazadas sobre los efectos a largo plazo del consumo de cannabis en la salud de sus hijos, aunque este estudio proporciona evidencia sólida, se requieren más investigaciones para comprender plenamente los mecanismos y consecuencias de esta exposición.
Los profesionales de la salud deben informar y sensibilizar a las futuras mamás sobre estos riesgos, asegurando un entorno más seguro para el desarrollo de los niños, la salud infantil es una prioridad que requiere atención y educación constante.
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